A continuación les presento las preguntas más comunes que se formulan emprendedores y empresarios, y la justificación de la intervención de un abogado que les dé respuesta a esas preguntas.
¿Qué hacer para crear una empresa? El abogado asesora a los emprendedores sobre la forma legal más adecuada para constituir una empresa en función de las responsabilidades a cargo de los socios, distribución de ganancias y la forma de disolución.
¿Bajo qué régimen fiscal debe operar la empresa? El abogado aconseja a la empresa en su registro ante el Fisco de acuerdo con las opciones más adecuadas que el Sistema Fiscal ofrece para las empresas que desarrollan actividades de comercio, servicio o industria.
¿Cómo formalizar las relaciones comerciales, laborales, etcétera? El abogado elabora contratos a la medida para que la empresa opere legalmente con sus trabajadores, proveedores, clientes, arrendadores, acreedores, deudores, etcétera. Cada relación presenta características particulares y lo mejor es no utilizar contratos estandarizados.
¿Cómo proteger la marca y los procesos de la empresa? El abogado guía a la empresa en el trámite legal de registro de marca, propiedad intelectual e industrial para evitar que competidores u otros hagan uso indebido de ellas.
¿Qué especificaciones legales debe tener el producto o servicio?, ¿en dónde es legal venderlo u ofrecerlo? El abogado se encarga del trámite de registros, permisos y autorizaciones de carácter legal y administrativo relacionados con los productos o servicios de la empresa, ante las autoridades competentes.
¿Cómo puede la empresa obtener financiamiento? El abogado consigue que la empresa cuente con ciertos requisitos y documentación legalmente soportada, los cuales los Órganos de Gobierno e Instituciones Bancarias señalan como obligatorios para otorgar fondos, subvenciones y créditos, pues ello da seguridad a quién y bajo qué condiciones se otorga el beneficio económico.
Es por ello que tanto los emprendedores como los empresarios no sólo deben considerar que un abogado intervenga en su representación cuando se presenten conflictos legales, sino más bien deben evitar llegar a dichos conflictos, contando siempre con la asesoría eficaz y oportuna de los profesionales del derecho. Ya que como todos sabemos, resulta mejor prevenir que remediar.
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